Sepa cuándo buscar tratamiento para los trastornos de salud mental
Sepa cuándo buscar tratamiento para los trastornos de salud mental
Saber cuándo buscar tratamiento para los trastornos de salud mental es importante para los padres y familiares. Por lo general, los familiares, las parejas, los maestros o los amigos son los primeros en sospechar que su ser querido o el alumno enfrenta sentimientos, comportamientos u otras situaciones que provocan que actúe de manera perjudicial, rebelde o estén tristes. Esto puede incluir lo siguiente:
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Problemas en la relación con amigos o familiares
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Problemas en el trabajo o la escuela
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Problemas para dormir
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Cambios en el apetito
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Problemas para expresar sus emociones
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Abuso de sustancias
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Retrasos en el desarrollo
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Dificultad para sobrellevar los problemas
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Falta de atención
También es importante saber que las personas de distintas edades manifestarán signos y comportamientos diferentes. Familiarizarse con los comportamientos habituales de los niños, adolescentes y adultos cuando se les hace difícil adaptarse a las situaciones a menudo sirve para identificar algún problema a tiempo, cuando se lo puede tratar. Es importante que las familias que sospechan que hay un problema en una o más de estas áreas busquen tratamiento lo antes posible. Hay tratamiento disponible para los trastornos de salud mental y a menudo funciona bien.
¿Cuáles son los signos y síntomas de un posible problema en un niño pequeño?
A continuación se mencionan los signos y síntomas más comunes de un posible problema emocional, del comportamiento o del desarrollo en los niños más pequeños. Sin embargo, cada niño puede tener signos y síntomas diferentes. Entre ellos, se encuentran los siguientes:
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Malas calificaciones o una disminución considerable en el rendimiento escolar. Puede ocurrir incluso si el niño estudia y se esfuerza por mejorar.
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Alejamiento de las actividades, los amigos o la familia.
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Interrupciones del sueño, como terrores nocturnos, pesadillas o insomnio.
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Hiperactividad.
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Agresión o mal comportamiento constantes o frecuentes que duran más de 6 meses.
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Rebelión constante o frecuente; rechazo a la autoridad y a las instrucciones durante más de 6 meses.
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Negativa frecuente o regular a asistir a la escuela.
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Negativa a participar en actividades escolares o familiares.
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Preocupación o ansiedad excesivos.
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Berrinches excesivos y regulares sin motivo.
Los signos y síntomas de un posible problema emocional, del comportamiento o del desarrollo pueden ser similares a los de otras afecciones. Consulte siempre con el proveedor de atención médica de su hijo para obtener un diagnóstico. Puede invitar al personal escolar a colaborar para tener apoyo y coherencia en el trato con el niño.
¿Cuáles son los signos y síntomas de un posible problema en un adolescente?
A continuación se mencionan los signos y síntomas más comunes de un posible problema emocional, del comportamiento o del desarrollo en los adolescentes que dan lugar a una evaluación de la salud mental. Sin embargo, cada adolescente puede tener signos y síntomas algo diferentes. Entre ellos, se encuentran los siguientes:
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Malas calificaciones o una disminución considerable en el rendimiento escolar. Puede ocurrir incluso si el adolescente estudia y se esfuerza por mejorar.
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Alejamiento social de las actividades, los amigos o la familia.
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Los maestros, amigos o familiares expresan inquietud por el comportamiento del adolescente.
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Abuso del alcohol o de las drogas.
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Problemas para dormir, como terrores nocturnos, pesadillas, insomnio o somnolencia excesiva constantes.
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Depresión. Puede incluir mal humor, negatividad y cambios de estado de ánimo.
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Cambios en el apetito, como negativa a comer, comer en exceso, rituales alimentarios, darse atracones o purgarse.
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Agresión o mal comportamiento constantes o frecuentes que duran más de 6 meses.
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Rebelión constante o frecuente; rechazo a la autoridad y a las instrucciones durante más de 6 meses.
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Enojo constante o frecuente durante más de 6 meses.
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Faltar a la escuela.
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Negativa a participar en actividades escolares, familiares, deportivas o sociales.
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Preocupación o ansiedad excesivos.
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Conductas en las que se hace daño a sí mismo.
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Amenaza con autolesionarse o lastimar a otros.
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Pensamientos sobre la muerte.
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Pensamientos suicidas o referencias al suicidio.
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Se va de la casa o amenaza con hacerlo.
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Comportamientos destructivos, como vandalismo o actividad delictiva.
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Comportamiento sexual inapropiado.
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Miente o engaña.
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Se queja mucho de malestares físicos.
Los signos y síntomas de un posible problema emocional, del comportamiento o del desarrollo pueden ser similares a los de otras afecciones. Consulte siempre con el proveedor de atención médica del adolescente para obtener un diagnóstico. Puede invitar al personal escolar a colaborar para tener apoyo y coherencia en el trato con el niño.
¿Cuáles son los signos y síntomas de un posible problema en un adulto?
A continuación se mencionan los signos y síntomas más comunes de un posible problema emocional, del comportamiento o del desarrollo en los adultos. Sin embargo, cada persona puede tener signos y síntomas diferentes. Entre ellos, se encuentran los siguientes:
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Disminución considerable en el rendimiento laboral, baja asistencia al trabajo o falta de productividad.
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Alejamiento social de las actividades, los amigos o la familia.
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Abuso del alcohol o de las drogas.
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Problemas para dormir, como pesadillas, insomnio, somnolencia excesiva o imágenes retrospectivas constantes.
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Depresión. Puede incluir mal humor, negatividad o cambios de estado de ánimo.
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Cambios en el apetito, como bajar o aumentar mucho de peso.
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Agresión constante o frecuente.
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Enojo constante o frecuente durante más de 6 meses.
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Preocupación o ansiedad excesivos.
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Amenaza con autolesionarse o lastimar a otros.
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Pensamientos sobre la muerte.
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Pensamientos suicidas o referencias al suicidio.
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Comportamientos destructivos, como actividad delictiva o robo.
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Comportamiento sexual inapropiado.
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Miente o engaña.
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Se queja mucho de malestares físicos, entre ellos de tensión constante o dolores o molestias frecuentes que no se asocian a una lesión ni otra causa física.
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Sentimientos repentinos de angustia, mareos o ritmo cardíaco acelerado.
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Aumento de los sentimientos de culpa, impotencia o desolación.
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Disminución de la energía.
Los signos y síntomas de un posible problema emocional, del comportamiento o del desarrollo pueden ser similares a los de otras afecciones. Consulte siempre con su proveedor de atención médica para obtener un diagnóstico.