¿Qué es el trabajo de parto prematuro?

El trabajo de parto prematuro es el que se inicia antes de alcanzar las 37 semanas de embarazo. El trabajo de parto se produce cuando el útero se contrae regularmente y el cuello uterino empieza a afinarse y a abrirse. Esto permite que el bebé (feto) entre en el canal de parto.

¿Cuáles son las causas del trabajo de parto prematuro?

No se sabe con certeza cuál es la causa en la mayoría de las mujeres. Las causas conocidas del trabajo de parto prematuro son las siguientes:

• Infecciones

• Sangrado vaginal

• Cambios hormonales

• Estiramiento del útero. Puede ser por estar embarazada de más de un bebé, por un bebé grande o por tener demasiado líquido amniótico.

¿Quiénes están en riesgo de entrar en trabajo de parto prematuro?

La mayoría de las mujeres que entran en trabajo de parto prematuro no tienen factores de riesgo conocidos. Sin embargo, algunos factores aumentan el riesgo de que una mujer entre en trabajo de parto prematuro. Por ejemplo:

• Tabaquismo

• Ser menor de 20 años o mayor de 35

• Enfermedades crónicas, como enfermedades del corazón o del riñón

• Consumir drogas ilegales, como la cocaína

• Útero de forma anormal

• Cuello uterino que no puede permanecer cerrado

• Estrés

• Parto prematuro en el pasado

• Ser de raza negra

• Placenta que se desprende del útero tempranamente

• Placenta en una posición anormal

• Placenta que no funciona tan bien como debería

• Rotura prematura de la bolsa que rodea al bebé (rotura prematura de membranas)

• Defectos congénitos en el bebé

• Problemas de crecimiento fetal

• Más de un bebé en el útero

¿Cuáles son los síntomas del trabajo de parto prematuro?

Estos son los síntomas más comunes del trabajo de parto prematuro:

• Tensión del útero (contracciones), especialmente más de 4 en 1 hora

• Cólicos de tipo menstrual

• Presión en la parte baja del abdomen

• Dolor de espalda

• Diarrea

• Alteraciones en el tipo o la cantidad de secreción vaginal. Puede ser sangre, mucosidad o líquido acuoso

• Flujo vaginal en cantidad

Si tiene algún síntoma de parto prematuro, llame a su proveedor de atención médica lo antes posible.

Algunos de estos síntomas pueden deberse a otras afecciones de salud. Consulte siempre con su proveedor de atención médica para obtener un diagnóstico.

¿Cómo se diagnostica el trabajo de parto prematuro?

Si su proveedor de atención médica cree que tiene un parto prematuro, es probable que la ingresen en el hospital. Se utiliza un monitor electrónico para comprobar la frecuencia de las contracciones y su duración. Este monitor tiene un pequeño dispositivo (transductor) que se coloca sobre el vientre con un cinturón. El transductor detecta y envía información sobre las contracciones al monitor. También se suele controlar la frecuencia cardíaca del bebé.

Otras formas de comprobar la existencia de un trabajo de parto prematuro pueden ser:

• Examen del cuello uterino. Su proveedor de atención médica puede revisarle el cuello uterino para ver si hay alteraciones.

• Ecografía transvaginal. Este examen de ultrasonido utiliza un dispositivo (transductor) que se coloca dentro de la vagina. El examen permite a su proveedor de atención médica medir la longitud del cuello uterino.

• Examen del líquido amniótico. Esto permite a su proveedor saber si la bolsa que rodea al bebé se ha roto.

• Pruebas de fibronectina fetal (fFN). La fibronectina fetal es una proteína que se encuentra entre la membrana amniótica y el revestimiento uterino. La presencia de fibronectina fetal se comprueba en una muestra de flujo cervical o vaginal. Si se encuentra, puede ser un signo de trabajo de parto prematuro.

¿Cómo se trata el trabajo de parto prematuro?

El tratamiento del trabajo de parto prematuro puede incluir lo siguiente:

• Reposo en la cama. Esto se puede hacer en su casa o en el hospital.

• Medicamentos tocolíticos. Estos ayudan a detener o reducir las contracciones. Pueden administrarse en forma de inyección o por vía intravenosa.

• Corticoesteroides. Pueden ayudar a que los pulmones del bebé crezcan y maduren. Es posible que los pulmones de los bebés prematuros no puedan funcionar por sí solos.

• Cerclaje cervical. Este procedimiento se utiliza para suturar el cuello uterino. Puede realizarse cuando el cuello uterino es débil y no puede mantenerse cerrado.

• Antibióticos. Se usan para tratar las infecciones.

• Parto del bebé. Su proveedor iniciará el parto del bebé si los tratamientos no detienen el trabajo de parto prematuro o si usted o su bebé están en peligro. Tal vez tenga que someterse a un parto por cesárea.

¿Cuáles son las posibles complicaciones del trabajo de parto prematuro?

El trabajo de parto prematuro puede dar lugar a un nacimiento prematuro. Aunque la mayoría de los bebés nacen después de las 37 semanas, los que nacen prematuros tienen un mayor riesgo de sufrir muchas complicaciones.

Los bebés prematuros nacen antes de que su cuerpo y sus aparatos y sistemas estén totalmente maduros. Estos bebés suelen ser pequeños, con un peso bajo al nacer (menos de 2,500 gramos o 5.5 libras). Tal vez también necesiten ayuda para respirar, comer, combatir las infecciones y mantenerse calientes. Los bebés que nacen antes de las 28 semanas de gestación son los que tienen más riesgo de sufrir problemas.

Los bebés prematuros pueden tener lo siguiente:

• Problemas para mantener la temperatura corporal o para mantenerse calientes

• Problemas respiratorios

• Problemas del corazón y de los vasos sanguíneos, como defectos cardíacos y problemas de frecuencia cardíaca y sanguínea

• Problemas sanguíneos, como un recuento bajo de glóbulos rojos (anemia), coloración amarilla de la piel por la descomposición de los glóbulos rojos viejos (ictericia) o un nivel bajo de azúcar en la sangre (hipoglucemia)

• Problemas en los riñones

• Problemas digestivos, como problemas de alimentación y mala digestión

• Problemas del sistema nervioso, entre ellos, hemorragias cerebrales o convulsiones.

• Infecciones

Los bebés prematuros también pueden tener problemas de salud crónicos. En general, cuanto más prematuro sea el bebé, más graves y duraderos son los problemas de salud.

¿Qué puedo hacer para prevenir el trabajo de parto prematuro?

Cada vez más bebés sobreviven, aunque hayan nacido antes de tiempo y sean muy pequeños, Lo mejor es prevenir el trabajo de parto prematuro.

La atención prenatal es importante para detectar problemas y factores del estilo de vida que pueden aumentar los riesgos del trabajo de parto y nacimiento prematuros. Estas son algunas maneras de prevenir el trabajo de parto prematuro:

• Si fuma, busque ayuda para dejar de fumar antes de embarazarse.

• Averigüe si tiene riesgo de trabajo de parto prematuro.

• Infórmese sobre los síntomas del trabajo de parto prematuro.

Si tiene un alto riesgo de parto prematuro, su proveedor puede administrarle la hormona progesterona. Ayuda a reducir el riesgo de parto prematuro si tuvo un parto prematuro en el pasado.

Cuándo llamar al proveedor de atención médica

Durante las visitas prenatales regulares, usted y su proveedor de atención médica hablarán sobre los síntomas del trabajo de parto prematuro y del parto normal. Si tiene algún síntoma de trabajo de parto prematuro, como contracciones, calambres, dolor de espalda o pérdida de líquido por la vagina, comuníquese con su proveedor de atención médica de inmediato.

Información importante sobre el trabajo de parto prematuro

• El trabajo de parto prematuro es el que se inicia antes de las 37 semanas de embarazo.

• Los síntomas incluyen contracciones, calambres, dolor de espalda o pérdida de líquido de la vagina.

• El tratamiento puede incluir reposo en cama, medicamentos, un procedimiento para suturar el cuello uterino o el parto.

• El trabajo de parto prematuro puede dar lugar a un nacimiento prematuro. Los bebés que nacen demasiado pronto corren el riesgo de sufrir muchos problemas de salud graves.

• Si tiene algún síntoma de trabajo de parto prematuro, llame a su proveedor de atención médica lo antes posible.

Próximos pasos

Consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo la visita con su proveedor de atención médica:

• Tenga en claro la razón de la visita médica y qué quiere que suceda.

• Antes de la visita, anote las preguntas que quiere hacer.

• Lleve a un acompañante para que lo ayude a formular las preguntas y a recordar qué le dice su proveedor.

• En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También anote las instrucciones que el proveedor le indique.

• Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo lo ayudará. Conozca los efectos secundarios.

• Pregunte si su afección se puede tratar de otra forma.

• Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrían significar los resultados.

• Sepa qué esperar si no toma el medicamento o no se realiza la prueba o el procedimiento.

• Si tiene una visita de control, anote la fecha, la hora y el objetivo de esta.

• Sepa cómo comunicarse con su proveedor si tiene preguntas.